Betansa y FEMM renuevan su colaboración

Conociendo mejor al colectivo Asperger

Desde Betansa tenemos el placer de colaborar con diferentes asociaciones que trabajan con el mismo objetivo que nosotros: integrar a las personas con diversidad funcional en la sociedad a través del empleo digno, remunerado y acorde a sus capacidades. Una de ellas es la Asociación Asperger Madrid, una entidad sin ánimo de lucro volcada en reivindicar los derechos de las personas con asperger y sus familias y ofrecer servicios profesionales de calidad. Lleva haciéndolo desde 2011, organizando actividades, patrocinios, facilitando información y asesoramiento sobre todo lo relacionado con este síndrome y creando diferentes grupos de apoyo y talleres donde las personas con síndrome de Asperger y su entorno pueden compartir sus experiencias, aprender y recibir apoyos para la búsqueda de empleo.

Su importante labor está muy ligada a lo que hacemos en Betansa, compartimos al cien por cien su entrega y nos sentimos plenamente alineados con la idea de que el trabajo es la mejor vía para la integración real y efectiva en una sociedad. Por eso, siempre es un placer para nosotros colaborar en sus actividades, como la que organizaron con motivo del Día de la Discapacidad, que tuvo como objetivo acercar el tejido empresarial al colectivo asperger, que lo conocieran de primera mano y comprobaron lo mucho que pueden aportar al mundo laboral.

Diferentes talleres

Para ello, invitaron a distintas organizaciones a compartir una entretenida jornada con personas con TEA, y el resultado no pudo ser más positivo: reímos juntos, debatimos, compartimos experiencias, alcanzamos metas comunes y constatamos, una vez más, que en este colectivo hay mucho talento valioso para el mundo laboral. Las actividades incluyeron varios talleres por equipos, formados por representantes de las empresas y personas con asperger.
El nuestro estaba formado por cinco integrantes, tres de ellos personas con TEA, y tuvimos el placer de coincidir con un compañero de Carrefour. La experiencia no pudo ser más enriquecedora: nuestro primer reto consistió en resolver entre todos una yincana, algo que se hizo muy fácil gracias a gran disposición de todos los participantes, en el segundo se contaban tres verdades y una mentira y en conjunto se decidía cuál era la falsa, lo que nos dio mucho en lo que reflexionar y tuvimos la oportunidad de compartir diferentes puntos de vista. El tercero consistió en un entretenido juego con código morse en el que había que buscar pruebas recorriendo el hotel que acogía el evento. Para finalizar, disfrutamos de un taller de risoterapia con improvisación de arte, algo con lo que nos divertimos, a la vez que aprendimos.

En resumen, fue una jornada inolvidable y reveladora en la que todos recordamos que las personas con diversidad funcional tienen muchísimo que aportar. Desde Betansa apoyamos y fomentamos este tipo de actividades, tan importantes para que el tejido empresarial descubra lo valiosos que pueden ser estos colectivos para sus negocios y fomente su integración laboral.